El Perú es conocido por ser uno de los países más ricos en biodiversidad de papas. Existen más de 4000 variedades de papas, lo que representa aproximadamente el 80% de todas las variedades de papa que se cultivan en el mundo.
La papa (Solanum tuberosum) es un cultivo importante en la historia y cultura de Perú. Los antiguos peruanos domesticaron la papa hace unos 8000 años en las regiones andinas del país, y desde entonces se ha convertido en un alimento básico esencial en la dieta peruana.
Las papas peruanas varían en forma, tamaño, color y sabor. Algunas variedades son ideales para freír, mientras que otras son mejores para cocinar o para hacer papas nativas tradicionales.
Entre algunas variedades se encuentra; la papa amarilla, huayro, chanchán, peruanita, tarmeña, yungay, papa oca, huaycha, entre otras variedades andinas.
Estas son solo algunas de las numerosas variedades de papas que se pueden encontrar en Perú, cada una con sus propias características y usos culinarios. La diversidad de papas en el país es un reflejo de su rica tradición agrícola y cultural.
Su agricultura se ha adaptado a las diversas condiciones climáticas y altitudes de la región andina, lo que ha resultado en el asombroso desarrollo de esta diversidad de papas.
La importancia de la papa en la cultura peruana también se refleja en festivales y celebraciones que rinden homenaje a este cultivo ancestral.
La «Feria de la Papa» se celebra cada año en la ciudad de Cusco, donde agricultores y productores exhiben y venden diversas variedades de papas nativas.
Perú país más ricos en biodiversidad de papas
La diversidad de papas tiene un gran valor cultural y científico, ya que muchas de estas variedades poseen características únicas de interés para el mejoramiento genético global de cultivos.
A nivel mundial, reconocen a Perú como el país con la mayor diversidad de papas. Este hecho refleja la importancia histórica, cultural y agrícola que este alimento básico tiene en la vida de los peruanos